miércoles

El Forjador - Arquitectura Industrial








Sobre la calle Perú 535, entre Mexico y Venezuela, barrio de Monserrat, se encuentra un edificio muy singular, representativo de la Arquitectura Industrial, cuya inauguración se remonta al año 1894. El cual fue construído, casi íntegramente en hierro con piezas prefabricadas oriundas de Francia, más precisamente de la fábrica de Gustave Eiffel; las que fueron trasladadas por barco hacia la Argentina. Para su incorporación sobre la estructura existente, se procedió a ensamblar cada una de las piezas al resto de la construcción que estaba en pleno desarrollo; bajo la dirección del arquitecto Lorenzo Siegeris. Esta construcción esta integrada por un sótano, planta baja, dos plantas de altura, sostenidas con estructura de hierro como bandejas superpuestas. A los costados dos pilares de mamposteria, un arco con elementos decorativos y ornamentado con una imponente escultura. Este edificio nació ante la necesidad del ingeniero mecánico Domingo Nocetti, de poder habilitar un lugar para la exposición y venta, de los tantos artículos que producía en su fábrica de máquinas agricolas, la que se denominaba "El forjador" Simbólicamente presente, en la figura, que se encuentra en lo alto "dando la primer forma con el martillo a cualquier pieza de metal". Además en la fachada se destacan: los pórticos, los ventanales, el pináculo art decó,... Desde hace unos años, dejo de funcionar en el rubro que siempre se había usado, por eso en la actualidad es un local bailable, conocido con el nombre de Museum.

viernes

Edificio Otto Wulf- Art Nouveau







En la intersección de avda Belgrano y Perú, barrio de Monserrat, se localiza un espectacular edificio de estilo Art Nouveau, con la original presencia de lo autóctono en la figura de los cóndores, además esas 8 figuras humanas masculinas denominadas Atlantes; con sus rasgos indigenas, de una altura aproximada de cinco metros reflejando a través de su magnitud estar soportando desde ese 2do piso al resto de la construcción de unos 60 metros de altura. Estos Atlantes, simbolicámente reflejan a los trabajadores de la obra con sus diferentes oficios, desde el herrero, albañil, carpintero, forjador, aparejador, escultor, capataz, como así tambien al arquitecto, es decir a los intervinientes; lo cual fue ideado y plasmado por su realizador el arquitecto danes Morten F. Rönnow. Esta obra fue encargada en el año 1912, por dos empresarios socios entre sí, el Sr Nicolás Mihanovich y el Sr Otto Wulf, significando para el momento un hecho excepcional, por su construcción en hormigón armado, lo cual no era muy común en esa época. Los materiales utilizados en la obra, fueron trasladados en su totalidad desde Europa. El edificio fue inaugurado en el año 1914, funcionando en su inicio y durante unos años, la sede diplomática del Imperio Austrohúngaro, por eso se observa en lo alto las dos cúpulas de color verde, que tienen en sus extremos, la mas alta un sol, se dice en honor al emperador de Austria Francisco José, y la mas baja una corona y la luna, en alusión a la emperatriz Sissi, o podría ser en reconocimiento a la culminación de la Alianza Imperial entre Austria y Hungría. Un bello edificio que no podemos dejar de observar detenidamente y éxtasiarnos.












martes

Conventillos de la Boca







Hasta principios del siglo XIX, el barrio de La Boca estaba prácticamente deshabitado. Vivían pocas familias y había una comunidad de personas negras, la cual llegó a tener su propia capilla. En el año 1900, arribaron al barrio las primeras familias de genoveses, quienes se asentaron cerca del puerto y de los talleres de los astilleros, lugar en el que los hombres, habían conseguido trabajo. Ellos, que eran carpinteros muy competentes, crearon sus propias viviendas. En los primeros tiempos, eran simples casillas construídas sobre pilotes de madera y paredes de chapa, situadas sobre terreno anegadizo; por ello la utilización de postes de aproximadamente un metro y más de altura; a causa de las inundaciones... por algo se lo llamaba " el barrio maritimo de la ciudad...
Los inmigrantes que trabajaban en los astilleros, entre otras tareas, también pintaban barcos. Los propietarios de estas empresas, permitían que sus empleados se llevaran los restos de pinturas, que eran impermeables, las que utilizaban para pintar sus precarias construciones de madera y chapa. Con esas sobras de diferentes colores, nació la identidad del barrio que lo caracteriza y le da un sello personal.
Se consideraba conventillo o casa de inquilinato "a aquellas que albergaban a más de cinco familias o personas independientes, incluído un encargado, siendo la unidad de locación una pieza, compartiendo en común, los servicios de baño, lavatorio, letrina , lavadero, y cocina ya que en las habitaciones no se podía cocinar. En el patio las mujeres se juntaban a lavar la ropa en los piletones.
Por una ordenanza municipal, se exigía que la superficie de las habitaciones fuera de 12 m2 por una altura minima de 3,5 m.
La gente los empezó a llamar conventillos porque su estructura, de no más de dos pisos, recordaba a los conventos de los padres curas, con habitaciones alrededor de una balconada de hierro y con una escalera central que llevaba al patio.
Por eso cuando uno observa estas construcciones rememora esa historia que se entrelaza entre el pasado y el presente.

domingo

El Kavanagh



El Kavanagh fue inaugurado el 15 de enero de 1936, en la esquina de San Martín y Florida, demandando su construcción apenas 14 meses. Fue el emergente de una década complicada, irrumpida por la industrialización, la inmigración, y manifestación de las vanguardias. Su ideóloga fue Corina Kavanagh, quien contrató al estudio Sánchez, Lagos y De la Torre, para construir una lujosa torre; pensada en un primer momento para ser rentada a familias ricas que manejaban negocios agrarios. Los profesionales contratados, diseñaron el proyecto teniendo en cuenta, lo requerido por Corina Kavanagh; un edificio escalonado, de hormigón armado y estilo racionalista. Un auténtico Rascacielos...
Un gigante de 120 metros de altura, con 30 pisos; que tuvo que estrechar sus plantas, por el perímetro triangular del predio. En pleno desarrollo del proyecto, el gobierno municipal autorizó a aumentar la altura original; en retribución se abrió una calle transversal, de uso semipúblico. La traza más atípica del edificio, fue la distribución de los ascensores ubicados en distintos puntos de la planta triangular, para permitir el acceso individual a los departamentos, eludiendo el cruce entre vecinos . La planta baja del Kavanagh se distingue por la amplitud de tratamiento, en sus diversos ambientes correspondientes a la recepción, salones de espera, galerías, vestíbulos y entrada de automóviles. Además, en esta área pública existe una independencia total de los ambientes, respecto de los accesos y zonas de servicio.
Los pisos y las puertas se realizaron con roble de Eslavonia y caoba, los herrajes se diseñaron especialmente en aleaciones de metal blanco evitando exponer a la vista clavos y tornillos de fijación. Otra peculiaridad es el escalonado del edificio, que dió origen a terrazas y miradores logrando que el 30 por ciento de los departamentos tuvieran extensiones al aire libre, algunas de las cuales por su magnitud llegan a ser auténticos jardines. El Kavanagh es una obra paradigmática de la Arquitectura Moderna Argentina, fue el primer rascacielos porteño y durante años el edificio más alto de Sudamérica. Es un Emblema que nos identifica...

miércoles

" Noche de Paz" ¡Feliz Nochebuena! ¡Feliz Navidad!


Noche de paz, noche de amor, todo duerme en derredor…”. Así comienza la primer estrofa de la canción más conocida del mundo. En cada festejo navideño se hace presente en las diversas culturas, que todos los años la entonan y la recuerdan. “Noche de Paz” fue cantada por primera vez en la nochebuena del año 1818, en la iglesia de un pueblo cercano a Salzburgo, Austria. Desde entonces, sus apacibles estrofas son entonadas en más de 300 idiomas. Su creación corresponde a un sacerdote llamado Joseph, quien desde sus primeros años manifestaba condiciones musicales, tanto es así que a los siete años ya tocaba el violin. En su adolescencia estudió filosofía, y tiempo despues ingresó al seminario, donde realizó sus estudios hasta culminarlos en el año 1816, ordenandose como sacerdote. Inmediatamente fue destinado a una parroquia; teniendo a su cargo celebrar la navidad, pero queria darle otro sentido, muy distinto a la de sus años de estudiante en donde la solemnidad y la frialdad caracterizaba al festejo. Preparando para esa su pimer Navidad, algo muy especial, para ello invitó a entonar las estrofas de esta canción, que había escrito y repartido entre los feligreses; y acompañado con instrumentos sencillos, logro que los fieles congregados vivieran una verdadera fiesta de alegría, conmoviendo los corazones de los allí reunidos, hermandados en esa única plegaria de paz y amor.......

martes

Benito Quinquela Martín








En el barrio de la Boca, sobre la calle Magallanes al 1140, observamos una casa de dos plantas de estilo colonial, con una particularidad en su fachada; unos bellos motivos de pintura y un relieve. Los cuales, hace tiempo atrás, fueron diseñados por don Benito Quínquela Martín y don Agustín Riganelli. ¿A qué se debe esto?... Simple, en este lugar vivía el célebre compositor de tangos y director de orquesta don Juan de Dios Filiberto; y los artistas antes mencionados, eran amigos de él. Por eso lo distinguieron con tal ofrenda; plasmaron su arte de manera Tan especial y no menos Original, en el frente de su casa. Se espera la concreción, por parte del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que a esta vivienda se la convierta en un Museo de Tango, algo tan anhelado e invocado por los vecinos, que diligentemente gestionaron medidas, con el único fin de preservar este lugar; el que guarda valores culturales muy caros para nuestra idiosincracia, la que debemos atesorar para no perder nuestras fuentes.

lunes

Museo Chevalier


En Irala 1162, en el barrio de la Boca, se encuentra una casa de estilo clásico italiano, en este lugar se asentaba un antiguo conventillo, al ser reciclado solamente perduro el actual patio posterior, el que se encuentra en perfecto estado.
A la entrada de la casa hay una escritura original que dice "Se vende lote de terreno con casilla de madera", con fecha del 11 de julio de 1885.
Esta casa es el taller de la artista plástica Celia Chevalier, y de exhibición permanente de la muestra Buenos Aires Ingenua, de pinturas estilo naif de su autoria ; en las que evoca lugares y costumbres de los años 50 basados en un fiel relevamiento arquitectónico, remitiendo a una Ciudad que solo permanece inalterable en la memoria de algunos...
En su interior, también se puede tomar contacto con la Galería del Recuerdo, que cuenta con testimonios de Benito Quinquela Martín y Juan de Dios Filiberto, junto con fotos y objetos antiguos que recuerdan la inmigración en el barrio de la Boca.
La Sra Celia Chevalier es una artista reconocida tanto en el país como en el exterior, la cual ha cosechado numerosos premios en reconocimiento a su magnifíca obra.
Este sitio fue declarado de interés cultural, por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en el año 2001.